¿Has escuchado acerca de los Pueblos Mágicos en México? Poseer el título de Pueblo Mágico es tener mucho que contar, es resguardar tesoros culturales e históricos invaluables. Las ciudades que reciben esta denominación, entregadas por las autoridades gubernamentales, son ciudades pintorescas y encantadas que no eran conocidas hasta entonces pero, debido a las características de su cultura y de los paisajes que ostentan, merecen serlo. Un Pueblo Mágico es un poblado pintoresco que rebalsa de cultura y merece ser conocido en el mundo entero. ¿Sabes cuántos hay en México? ¡Hasta hace unos años había más de 80!
Pensemos sólo en los de Sinaloa. Este maravilloso estado, que se levanta pujante en las costas del Golfo de California, es un destino turístico indiscutible que posee bellas playas de arena clara y aguas cristalinas, litorales salvajes y montañas repletas de misterio que te invitarán a la máxima aventura.
Si quieres aprovechar la oportunidad para seguir conociendo sus más bellos rincones, ¡visita sus distinguidos Pueblos Mágicos!
1. El Fuerte. Se encuentra en el noroeste del estado y forma parte de famoso Circuito Ecoturístico Mar de Cortés – Barrancas del Cobre, o sea que, además de poseer encantos culturales fabulosos está sumergido en el paraíso. 1564 fue el año en el que se fundó esta ciudad. ¡Cuántos hechos históricos han tenido lugar en estas tierras! Cada uno de ellos revive en las construcciones coloniales que engalanan las callecitas del lugar. Además de visitar la famosa Plaza de Armas y la Casa del Congreso Constituyente debes salir a recorrer sus entornos naturales. Visitar la Cuenca del Río El Fuerte, valdrá la pena. Llegar hasta allí no es fácil pero si lo haces te encontrarás con una de las muestras rupestres más importantes de la zona, muestra que recuerda que ésta fue tierra de grupos nahoas.
2. Cosalá. Antigua tierra habitada por los grupos indígenas Tepehuanes, Acaxees y Xiximies que, como la mayoría de ciudades prehispánicas, fue testigo de una de las transformaciones culturales más tristes de la historia. Actualmente este pueblo conserva su diseño original, aquel que obtuvo con la llegada de los españoles en el siglo XVI. Las calles de adoquines, las banquetas en las playas y en las veredas, las fachadas coloniales y barrocas. En sus alrededores, a menos de 20 kilómetros del centro, encontrarás manantiales paradisíacos que se convertirán en tus mejores aliados para soportar el calor. Un ejemplo de ello: Vado Hondo, una cascada natural alucinante.
3. El Rosario. Se encuentra al sur del estado, casi al límite con Mazatlan y sus bellas playas. Su fundación se remonta al siglo XVII y su diseño urbano recuerda fielmente a aquellos primeros tiempos de organización social: la plaza principal, la iglesia y pequeñas casitas coloniales, todo esto sobre la gran riqueza oculta de las entrañas de la tierra en las que abundan los minerales preciosos como la plata. Los imperdibles en esta ciudad son la Iglesia de Nuestra Señora de El Rosario, la Casa de Lola Beltrán y el Museo de la Cultura Totorame.
Como estos pueblos, en Sinaloa podras hallar cientos de atracciones mas que te seduciran desde el primer momento. ¿Que esperas para comenzar a planificar tu estadía en un destino que no dejará de sorprenderte nunca?
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